Huelga de limpiadoras en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid
Comienza la huelga indefinida para evitar el despido del 45% del personal de limpieza. CLECE, filial de ACS, empresa de Florentino Pérez, ha pujado las condiciones del pliego con una reducción de 8 millones en una subasta a la baja. Al estilo de Sacyr en Panamá.
El lunes 13 de enero ha comenzado la huelga indefinida de las limpiadoras del Hospital Ramón y Cajal, en Madrid. El conflicto surge tras la última subasta en la que dos empresas, CLECE y FERROSEL, consiguieran la adjudicación en una subasta a la baja, es decir, presupuestando menos dinero en la adjudicación de la misma. Las dos empresas se reparten el negocio de la limpieza hospitalaria Madrileña.
El palco del Real Madrid, sigue siendo una mina de oro para florentinos y fefes
El Hospital Ramón y Cajal corresponde a CLECE, filial de ACS, empresa de Florentino Pérez, que presupuestó 8 millones menos que la anterior gestora. Para cumplir con el pliego de condiciones CLECE ha previsto la reducción de un 45% del personal en el Ramón y Cajal y un 40% en La Princesa. Aunque en éste último ha habido acuerdo, el comité de empresa del Ramón y Cajal ve excesivo el número de despidos solicitados, que no serán cubiertos no tramitación de prejubilaciones, lo que sí hubiera supuesto la sustitución de una trabajadora por otra. 41 de las trabajadoras hasta ahora han admitido el despido voluntariamente. La mayor reivindicación de las que se quedan es que estas reducciones de personal son en detrimento del servicio, que ya se está empezando a notar las consecuencias porque supone más metros a limpiar en el mismo horario. Eso imposibilita, no ya una limpieza profunda, sino una limpieza adecuada porque no da tiempo a limpiarlo todo y no existe criterio para priorizar la limpieza de un área sobre otra.
Nines, del comité de empresa, nos comentaba esta mañana durante la concentración con la que inauguraban esta huelga indefinida, que los médicos y facultativos ya están viendo las consecuencias y que hay apoyo de los mismos. Además pone en duda que si no consiguen los recortes con despidos no vaya a proceder luego a un ERE o a tocarse el convenio, como está siendo habitual en las empresas de la sanidad, lo que supondría recorte en días libres, vacaciones, etc. Destaca que esta vez no es una lucha por mejorar el convenio, sino que es una lucha por evitar un ataque, que por eso notan más apoyo popular y por eso han conseguido unidad sindical. Lo que no han conseguido todavía es poder negociar con la empresa, que sólo se ha reunido con ellas para poner encima de la mesa sus exigencias. Otra de las denuncias es la excesiva contratación de seguridad privada, de la que no entienden el motivo más allá de coartar a las propias trabajadoras, y los excesivos servicios mínimos que ha impuesto, de nuevo sin negociar, la Consejería de Sanidad: un 98.78% en los tramos urgentes, es decir durante el día, un 59.73% en los servicios no urgentes, lo que supone más personal trabajando que el personal que quedaría después de los despidos. Una de las trabajadoras destacaba que, además de por su puesto de trabajo, también iba a la huelga como usuaria “no es agradable pensar que por entrar a un vestíbulo sucio cualquier persona pueda coger una infección. La limpieza en el Hospital debe ser prioritaria”.
Una de las empresas de seguridad contratadas por florentinos y fefes, pertenece a un sicario de rouco varela "colocado" como consejero en la Cope
Así funciona el pp de esperanza aguirre. Huele que apesta.
Angel Velazquez
esmarconi@hotmail.es
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